El Movimiento
Hebreo Católico
El movimiento Hebreo Católico es una
corriente cultural cristiana de alcance mundial, que se basa en la cultura
hebrea, que practicamos y promovemos, aceptando las enseñanzas doctrinales del
Magisterio de la Iglesia Católica Apostólica Romana.
Cabe aclarar que no pretendemos ser ni un grupo cismático, ni sectario, y tampoco, como hay quienes nos han rotulado por ignorancia, como una logia.
Cabe aclarar que no pretendemos ser ni un grupo cismático, ni sectario, y tampoco, como hay quienes nos han rotulado por ignorancia, como una logia.
Básicamente,
es la
práctica espiritual
de lo
mismo que crees como católico, pero en hebreo.
Adicionalmente aparecen algunos detalles
culturales provenientes de la cultura hebrea original, en toda su variedad,
como por ejemplo su origen puede sefaradí, ashkenazi, israelí, yemení.
A esta corriente cultural le denominamos "carisma hebraico".
Nos damos a conocer con este nombre, que recibimos del Padre Fundador Elías Friedman (1987), carmelita descalzo de origen sudafricano, quien quiso nombrar de alguna manera a los católicos de origen judío en Israel. Antiguamente se les denominaba judíos-cristianos o bien judíos católicos, pero se dió cuenta que se debía reservar la denominación "judío", asumiendo la forma tradicionalmente aceptada a quien practica los dogmas del Judaísmo tradicional.
Por tanto define con “hebreo” un término más amplio, abarcando a quienes se conciban a sí mismos, como parte permanente del pueblo que eligieron.
Esta denominación se generalizó a nivel mundial, denominándose de este modo a los católicos que practican y promueven la cultura hebrea, tanto dentro, como fuera de Israel.
A esta corriente cultural le denominamos "carisma hebraico".
Nos damos a conocer con este nombre, que recibimos del Padre Fundador Elías Friedman (1987), carmelita descalzo de origen sudafricano, quien quiso nombrar de alguna manera a los católicos de origen judío en Israel. Antiguamente se les denominaba judíos-cristianos o bien judíos católicos, pero se dió cuenta que se debía reservar la denominación "judío", asumiendo la forma tradicionalmente aceptada a quien practica los dogmas del Judaísmo tradicional.
Por tanto define con “hebreo” un término más amplio, abarcando a quienes se conciban a sí mismos, como parte permanente del pueblo que eligieron.
Esta denominación se generalizó a nivel mundial, denominándose de este modo a los católicos que practican y promueven la cultura hebrea, tanto dentro, como fuera de Israel.
"No diga judío-católico, diga:
hebreo-católico"
Por siglos no se había
encontrado un término apropiado para denominar a los judíos bautizados, y fué
asimismo un judío bautizado en el siglo 20, un monje carmelita de origen
sudafricano llamado Elías Friedman, quien descubrió que el sinónimo
"hebreo" en lugar de "judío" era mucho más amplio y también
incluía a los católicos sin origen judío que hablan hebreo y viven en Israel.
El término se ha generalizado y difundido por todas las sociedades católicas.
Todos conocemos el término antisemita para denominar a las personas que no
concuerdan con la cultura y pensamiento judíos, pero pocos conocen el término
que engloba a las personas que sí simpatizan con dicha cultura y pensamiento.
Ese término es FILOSEMITA.
Pues bien, los católicos
filosemitas son católicos sin origen judío, que son estudiosos de idioma hebreo
y lenguas judaicas, o bien estudiosos de la cultura y pensamiento judíos, o
bien, participan en el diálogo ecuménico que la Iglesia mantiene con el
Judaísmo.
Tantos siglos de rivalidad y ríspido diálogo interreligioso entre los
cristianos y judíos, han hecho olvidar a muchos católicos acerca de nuestros
orígenes judaicos, y, dada la preponderancia de la cultura greco-latina en la
Iglesia en Occidente, al experimentar el carisma hebraico se produce un shock
cultural, cuyo resultado puede ser de tolerancia o rechazo; así
que cualquiera de estas 2 actitudes conforman la diversidad de la aceptación
personal. Nuestro trabajo es la difusión de este carisma hebraico para que, a
mayor conocimiento, se empiecen a derribar prejuicios asociados al Judaísmo.
Es de hacer notar que trabajamos por difundir el trabajo de la Iglesia Católica Apostólica Romana en Israel, (por los católicos de habla hebrea y por ser el país de Nuestro Señor), pero también es extensivo a toda la Tierra Santa a través del Patriarcado Latino de Jerusalén.
Es de hacer notar que trabajamos por difundir el trabajo de la Iglesia Católica Apostólica Romana en Israel, (por los católicos de habla hebrea y por ser el país de Nuestro Señor), pero también es extensivo a toda la Tierra Santa a través del Patriarcado Latino de Jerusalén.
Es de
destacar también, que en el conflicto de Medio Oriente,
acatamos en plenitud, la política
oficial que la Iglesia
mantiene en las naciones que lo
comprenden.
Bien, abocándonos al tema
en forma concreta, definimos:
¿Quién es
hebreo-católico?
Especialmente
los católicos
de tradición hebrea.
·
Católicos de origen judío o descendientes directos.
(judíos bautizados en la Iglesia)
·
Católicos
considerados B'nei anusim (descendientes
de los judíos desterrados de España en 1492)
·
Católicos en el
mundo que hablen hebreo.
·
Católicos en general
que viven en Israel (cuya primera lengua no necesariamente es hebreo,
por ejemplo: ruso y árabe)
por ejemplo: ruso y árabe)
Católicos simpatizantes
(Filosemitas)
·
Católicos que estudien idioma hebreo, judaismo
comparado, practicantes del carisma, etc.
·
Católicos en
general que amen Tierra Santa.
·
Católicos en
general que profundizan su fé, estudiando las raíces judaicas de la Iglesia.
Además, un hebreocatólico
puede ser miembro del clero o laico.
Si eres católico y no
tienes raíces hebreas o judías, también puedes participar en el movimiento,
simplemente uniéndote a nuestra comunidad y realizando las actividades.
¿Quienes
son los católicos de tradición hebrea?
Son
católicos bautizados que conservan raíces hebreas; no han abandonado en ningún
momento el Judaísmo, sino que ven en Jesús (en hebreo Yeshúa) la perfección de
la ley y la cumbre de la historia del pueblo de Israel. Conservando su
identidad y tradiciones judías, a ejemplo de las Iglesias Católicas Orientales
(también llamadas “uniatas”) ven en la Iglesia Católica el complemento de su
camino espiritual.
Los católicos de tradición hebrea no conciben el Judaísmo como religión sino como la cultura del Pueblo Judío, del que ellos nunca se han desvinculado. Se sienten parte de una nación concreta: Israel, y viven en el seno de la Iglesia Católica toda su identidad y costumbres, y leen esas tradiciones a la luz del Evangelio y del Magisterio de la Iglesia.
Los católicos de tradición hebrea no conciben el Judaísmo como religión sino como la cultura del Pueblo Judío, del que ellos nunca se han desvinculado. Se sienten parte de una nación concreta: Israel, y viven en el seno de la Iglesia Católica toda su identidad y costumbres, y leen esas tradiciones a la luz del Evangelio y del Magisterio de la Iglesia.